Del corazón al escenario: El estudio y la aplicación del teatro de la conciencia

 -Andy Cañedo, 2019.

Del corazón al escenario

El estudio y la aplicación del teatro de la conciencia

Los seres humanos somos seres complejos porque, a diferencia de otros seres vivos que actúan con el motor de sus instintos, nosotros poseemos un arma de doble filo: las emociones. Pero ¿qué es una emoción?  Una emoción es un proceso que se activa cuando el organismo detecta algún peligro, amenaza o desequilibrio con el fin de poner en marcha los recursos a su alcance para controlar la situación (Fernández Abascal y Palmero Cantero, 1999). Las emociones y el comportamiento humano son estudiados a través de la psicología, la antropología social, sociología, entre muchas otras ciencias que tienen como objeto de interés al ser humano. Sin embargo, recientemente ha surgido una nueva forma de estudiar y trabajar con las emociones humanas: el teatro de la conciencia. A lo largo de este escrito, describiré y analizaré la metodología que utiliza Pax Dettoni para el estudio y la aplicación del teatro de la conciencia, así como otras teorías en que se basa para crear esta nueva corriente teatral.

La metodología de Pax Dettoni

Pax Dettoni es una antropóloga social con un máster en estudios teatrales que plantea su inquietud de usar el teatro trabajando con la inteligencia emocional y la inteligencia del corazón para la construcción de la paz. Su metodología es usada para impartir formación a educadores, trabajadores sociales, jóvenes y niños y para integrar conceptos teatrales a la educación básica, con el fin de prevenir la violencia (Dettoni, s/f).

El teatro de conciencia es un concepto que surge entre el 2010 y el 2014 (Dettoni, s/f). Esta metodología, al ser tan reciente, abre un campo de estudios nuevo que podrá ser explotado de diversas formas en el futuro, a medida que éste se vaya dando a conocer. Para comprender este estudio, debemos conocer un poco acerca de los libros en los que la autora Pax Dettoni, desglosa los conceptos más importantes de su metodología, estos son: Emociones ¡A escena! y La inteligencia del Corazón (Dettoni, 2014; Detonni, 2017).

teatro de la Conciencia: Emociones ¡A escena!

En el libro Emociones ¡A escena! de Pax Dettoni, encontramos una recopilación de las primeras tres obras de teatro de conciencia: ¿Quién soy yo?, ¿Quién manda aquí? y Per Donaire, acompañadas de una guía para trabajar a partir de ellas con fines pedagógicos.

En esta obra, Pax Dettoni visualiza el teatro de la conciencia como una especie de catarsis emocional, un retorno a los orígenes del teatro, que también nació como una reflexión personal y, al mismo tiempo, colectiva sobre los valores, pasiones, errores y terrores humanos (Amiguet, 2014).

El surgir de esta metodología ocurre entonces por la inquietud de Pax Dettoni, de la importancia de desarrollar inteligencias emocionales y del corazón desde edades tempranas, pero para que esto suceda, antes debemos estar educados todos en estos temas. Y qué mejor manera de aprender, que con el teatro (Dettoni, 2014). Así, el teatro de la conciencia podría definirse de forma técnica como el arte de escenificar el interior de uno mismo, trabajando con conceptos básicos de la inteligencia emocional y de la inteligencia del corazón.

La inteligencia emocional y la inteligencia del corazón

La inteligencia emocional no es una idea que apenas se esté dando a conocer. Ésta se ha estudiado desde mucho tiempo atrás, cuando por primera vez se dio a conocer el término de inteligencias múltiples, que fue incorporado por Howard Garner dentro de su libro Frames of Mind, y aunque no las llamaba “inteligencia emocional” o “inteligencia del corazón”, presenta la inteligencia intrapersonal y la interpersonal, que son la capacidad de entender y manejar los sentimientos propios y de las demás personas respectivamente (1983).

El nombre de inteligencia emocional surge como tal gracias a Salovey y Mayer, quienes lo definieron en una serie de artículos científicos como la habilidad de procesar información sobre las emociones propias y de los demás (1990). El concepto fue más tarde tomado y estudiado a fondo por Daniel Goleman quien define la inteligencia emocional como aquello que nos permite tomar conciencia de nuestras emociones y de las emociones de quienes nos rodean para así, tener una actitud empática que nos permitirá un mejor desarrollo (1996).

Pax Dettoni también aborda este término en su libro la inteligencia del corazón, haciendo importantes aportes al estudio de esta, pues asegura que la inteligencia emocional es necesaria para desarrollar la inteligencia del corazón. Dettoni expresa dentro del mismo que la inteligencia del corazón es aquella que empezamos a usar cuando decidimos aprender a amar, cuando decidimos educar nuestras emociones y regular nuestros pensamientos para trascendernos a nosotros mismos y estar auténticamente al servicio de los demás (2014).

¿Pero qué es en realidad la inteligencia del corazón? De forma concreta, Pax Dettoni la describe como el descubrimiento del Verdadero Yo, y con una divertida analogía en la que compara al ser humano y sus máscaras con una cebolla con muchas capas, en donde explica cómo hay que desenmascararnos o bien, quitarnos todas nuestras capas, para así poder descubrirnos a nosotros mismos, y descubrir nuestros sentimientos. Por lo tanto, la inteligencia del corazón es aquella que nos invita a conocer y gestionar nuestras emociones para así entender las ajenas a nosotros (2014).

Antecedentes: El teatro como recurso pedagógico

Pax Dettoni resulta sin duda innovadora con su particular estructura metodológica en la que utiliza al teatro como toma de conciencia, sin embargo, el teatro como recurso pedagógico, o aplicado en educación, es algo que ya había sido concebido antes.

Uno de los autores que ha estudiado el teatro como recurso pedagógico, es Jacob Levy a través del psicodrama, método psicoterapéutico ideado que consiste en la dramatización de escenas de la vida propia, con el fin de integrar situaciones de aprendizaje (Rojas Bermúdez, 1997).

El poder reparatorio del arte no siempre es valorado en toda su dimensión en los proyectos sociales. A menudo es visto solamente como un adorno o un aporte tangencial a otros acercamientos que abordan las problemáticas sociales o psicológicas de manera más directa. El aporte de las artes escénicas –y de seguro también de otras artes- a los procesos terapéuticos y formativos tiene, sin embargo, su propio espacio de desarrollo, ofreciendo aproximaciones y explorando lugares que a veces, por recónditos e inespecíficos, escapan a otro tipo de intervenciones (Retuerto, 2009: p.85).

Esta inquietud de la relación del arte con procesos terapéuticos y formativos o reformativos existe también en lo que se conoce como teatro penitenciario, que surge hace 40 años gracias a Jorge Correa y Juan Pablo de Tavira y que tiene como fin funcionar como una herramienta de reinserción social, a través del teatro (Anzures, 2015).

Incluso podemos irnos mucho más lejos, cuando el teatro o el drama es propuesto por primera vez como aplicación a la educación. Esto ocurre alrededor de la década de 1960, gracias a Dorothy Heathcote, quien propone el uso del arte dramático como medio de aprendizaje. Si bien en su tiempo fue considerado un método poco ortodoxo, plantea las bases de lo que sería el uso del teatro aplicado en educación (Wagner, 1999).

Como estos ejemplos, existen muchísimas más ramas teatrales y de investigación que con distintos enfoques se relacionan al mismo campo de estudio: la visión del teatro como recurso pedagógico y en algunos casos terapéutico.

Conclusiones

Como se muestra a lo largo del texto, el teatro ha sido y sigue siendo estudiado como ayuda pedagógica y formativa gracias a su capacidad catártica (concebida así desde el principio de la existencia del teatro en Grecia). Esto ha abierto paso a que nuevas metodologías como lo es el teatro de la conciencia de Pax Dettoni surjan, en este caso, como un modo de aprendizaje y descubrimiento interno para el desarrollo de las inteligencias anteriormente estudiadas, la inteligencia emocional y la inteligencia de corazón.

La investigación nunca se detiene, el campo es infinito, y con todos los recursos que nos anteceden y los que siguen surgiendo, no me imagino cuánto puede servir el teatro en función educativa, cuánto puede cambiar el teatro de conciencia si es implementado como recurso pedagógico desde edades prontas, pero sobre todo cuánto puede hacer el teatro por el mundo y las personas que lo habitan.

Referencias

Amiguet, Lluis (2014). “Si quieres mejorar tu vida, ponla en escena” en La Vanguardia, edición (num).

Anzures, Denise. (2015). “La génesis del teatro penitenciario en México” en Revista Digital Universitaria, 16 (7).

Dettoni, Pax. (2014). La inteligencia del corazón. España: Editorial Destino.

Dettoni, Pax. (2017). Emociones ¡A escena! España: Editorial Círculo Rojo.

Dettoni, Pax. (s/f) Pax Dettoni: Acerca de mí. España: Teatro de Conciencia. Recuperado de: http://paxdettoniserrano.com/acerca-de-mi-2/

Dettoni, Pax. (s/f) Pax Dettoni: Teatro de Conciencia. España: Teatro de Conciencia. Recuperado de: http://teatrodeconciencia.org/

Fernández Abascal, Enrique; Palmero Cantero, Francesc. (2002). Psicología de la motivación y emoción. España: McGraw-Hill/Interamericana.

Gardner, Howard. (1983). Frames of Mind: The theory of multiple intelligences. Estados Unidos: Basic Books.

Retuerto, Iria. (2009).  Propuesta metodológica para un trabajo teatral con niños, niñas y adolescentes vulnerados. Chile: ONG Raíces: p.85.

Rojas Bermúdez, Jaime. (1997). Teoría y técnica psicodramáticas. España: Editorial Paidós.

Salovey, Peter y Mayer, John. (1990). “Emotional intelligence. Imagination, Cognition, and Personality” en Positive Emotion and Psychopathology Lab. Estados Unidos: Baywood Publishing: pp. 186-190.

Wagner, Betty Jane. (1999). Dorothy Heathcote: Drama as a Learning Medium. Estados Unidos: Heinemann Drama.

 


Comentarios

Entradas populares de este blog

El perfume: deshumanización, sexualización y feminidad

Poesía épica, tradición oral y su trascendencia: ¿Qué dice Aristóteles sobre La Odisea de Homero?

Discurso feminista en El suplicio del placer por Sabina Berman